Los Robin Hood andaluces expuestos en la nueva galería inaugurada en el ‘pueblo de la pasa’ de Málaga
Entre un paisaje de montañas fértiles llenas de cultivos y viñedos, un día se escondieron algunos de los personajes más destacados del bandolerismo andaluz. Hoy, esta panorámica correspondiente al pueblo de El Borge. En él se vislumbran además, casitas blancas, entre las que destaca en la cima de una colina un enorme edificio de tonos azules claros. De esta forma, el Borge recupera la historia del bandolerismo romántico con la inauguración de “La Galería del Bandolero”. Su apertura tuvo lugar el pasado 22 de febrero para los borgeños, y al día siguiente en acto oficial para las autoridades y el público general.
Ezequiel Molla Muñez, técnico municipal de información turística del pueblo, explica que el recibimiento ha sido fantástico, congregándose los días de inauguración más de 300 personas. Así mismo, afirma que desde su apertura, han llegado visitantes de toda la comarca de la Axarquía y turistas principalmente norteuropeos.

¿Qué es el bandolerismo romántico? Un poco de historia
El objetivo principal de la pinacoteca, como ya deja entrever su nombre, es rendir homenaje al bandolerismo romántico el cual tuvo especial relevancia en los montes de Andalucía entre los siglos XVII hasta casi principios del XX. Este es considerado históricamente como un movimiento de rebelión llevado a cabo por ciudadanos disidentes con las formas políticas de la época, cuando imperaban sobre todo las monarquías absolutistas. Su actividad consistía en robar a los actores de las altas esferas (reyes, grandes terratenientes, marqueses, burgueses adinerados), y parte del dinero y las joyas birladas, las repartían entre el pueblo, a quienes consideraban los verdaderos dueños y merecedores de estas. Así, a pesar de que eran considerados auténticos ladrones y alguno incluso llegaban a matar, excusaban sus actos como parte de una ‘justicia divina’.
Su romantización viene dada por su cercano trato con la gente de a pie. Esto les creaba buena reputación entre el grueso de la población, ya que eran viajeros que conocían los contextos históricos de la época y luchaban por la independencia de los territorios que frecuentaban. De hecho, muchos bandidos actuaron como un soldado más luchando contra los franceses durante la Guerra de Independencia Española (1808-1814). Además, estos iban pregonando sus hazañas de pueblo en pueblo, presentándolas como historias de héroes y romantizándolas.
El Museo del bandolerismo
Esta galería recupera la colección completa del antiguo Museo del Bandolero de Ronda, que cobra sentido en un municipio como El Borge, donde nació uno de los bandoleros más temidos de su tiempo, Luis Muñoz, “el Bizco Arboge”.
Otros de los principales personajes del bandolerismo que se encuentran expuestos en la galería junto a sus respectivas historias son:Joaquín Camargo, “El Vivillo”; José María Hinojosa, “El Tempranillo”; Juan José Mingolla, “Pasos largos”; y José Ulloa Navarro “El Tragabuches”. Este último sería de inspiración para la creación y posterior emisión de una de las series de televisión infantiles más populares en Andalucía: Bandolero.

Esta tradición de romantización del bandolerismo por parte de los medios de comunicación comenzaría ya a fraguarse en la época con la creación de la figura ficticia de ‘Curro Jiménez’. Su figura, en realidad no existió, si no que su película se basaría en la historia del bandolero “El Barquero de Cantillana”.

Las otras partes de la historia
A pesar de ser el bandolerismo un mundo machista, la exposición ha conseguido rescatar muchas de las mujeres que también lo ejercieron y presenta los archivos que recogen sus aventuras.

Por otro lado, también se incluye en la exposición la otra cara de la historia, referente a las instituciones que luchaban contra el bandolerismo, como es la Guardia Civil. Este cuerpo de seguridad se constituyó a iniciativa y bajo el control del mariscal de campo, Ramón María en 1844. El objetivo era afrontar y acabar con este movimiento.

“La Galería del Bandolero” ofrece visitas generales y guiadas, tanto individuales como grupales en horario de mañana y tarde. Los precios oscilan entre los tres y quince euros. Para información más concreta, el museo dispone de su propia página web.
Excelente reportaje.
muchas gracias 🙂