NAURU: TRAGEDIA AUSTRALIANA

La isla Australiana de Nauru parece sacada de una leyenda griega. Una de esas historias en las que una comunidad alcanza lo más alto y, tras un tiempo de felicidad, cae en picado vertiginosamente. De hecho, la historia de Nauru se resume en una palabra: fosfato. Este material fue la causa de su esplendor y, ahora, es la causa de su declive. 

 

Inicio de la explotación de fosfato en Nauru

La manera en la que se originó fosfato en la isla es curiosa. Nauru está situada en medio del pacífico y fue elegida por las bandadas de gaviotas para defecar. Esto hizo que la isla se convirtiera en un váter gigante y oficial para estas aves.

Cuando pasaron varios años, la isla contenía un porcentaje de excrementos enorme que daría paso a la generación de fosfato.  Entonces, cómo es de esperar, los gobiernos de la isla decidieron explotar este recurso. 

El país más rico del mundo

Toda esta explotación de fosfato convirtió a la isla en el país más rico del mundo en los años ochenta (. No obstante, cometieron un error clave: no tenían plan de explotación responsable. Su objetivo era conseguir dinero a través de la explotación indiscriminada de este recurso. 

Esta situación tuvo como consecuencia el fin del fosfato en la isla y, por tanto, el final de toda su historia económica. 

El declive de Nauru: contaminación, obesidad y cárceles. 

La indiscriminada explotación dio como resultado un país con el 80% de su suelo completamente contaminado. Lo que hizo que no se pudieran realizar grandes tareas agricultoras y que la mayoría de sus habitantes se tuvieran que alimentar de latas de conserva.  

La mala alimentación acabó por convertir Nauru en el país con más obesidad del mundo. 

Ante todo esta crisis económica y social. La isla tomó cartas en el asunto e hizo un trato con Australia: ayuda económica a cambio de recibir a las personas inmigrantes como refugiados en sus tierras. 

Esto podría parecer positivo, pero fue el último paso para el declive de la isla. Pues los lugares habilitados para los refugiados son fácilmente comparables con una cárcel. En este lugar se quiebran muchos de los artículos recogidos en los derechos humanos.

Reflexión final

La historia de Nauru nos cuenta la forma en la que un país próspero acaba siendo un lugar donde nadie quiera ir. Todo por la avaricia momentánea de unos cuantos. 

Nauru relata la forma en la que la codicia ha hecho de una isla paradisíaca, un lugar temible, árido y desolador. 

Esperemos que sea un ejemplo de lo que NO hay que hacer y que se tenga en cuenta para futuras situaciones. 

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